Powered By Blogger

lunes, 12 de septiembre de 2011

PREPARAR EL FUTURO

Si en este momento escuchamos a los “gurus” de la economía mundial, nos bombardean con la idea que la crisis económica afecta a todo el mundo en una recesión sin precedentes. Si escuchamos a los políticos se exculpan de esta crisis, directamente con los mercados y la deuda, y que hay que cortar por lo sano en lo social. Si escuchamos a los bancos siempre se quejan de que el estado no les da suficiente dinero para salir de la crisis de la que no quieren ninguna culpa. Si escuchamos a los empresarios no pueden hacer nada si no hay recortes sociales y los bancos les prestan dinero. Si escuchamos al ciudadano de a pie es porque milagrosamente esta sobreviviendo en este caos, aunque su voz está acongojada.

La memoria es mala compañera; para según se trate, y si lo ocurrido ha sido en el extranjero aun más. Ya nadie recuerda a Lheman Brothers y otros especuladores norteamericanos, que en su día, fueron la punta del iceberg que puso al descubierto todas las hipotecas basura y los productos financieros tóxicos en Estados Unidos, y que arrastraron a Europa, y a los bancos de medio planeta.

El mundo capitalista se desmoronó de golpe porque su beneficio de siempre, no era más que humo y se lo habían vendido como un gran valor. Cuantos especuladores se hicieron millonarios, seguro que muchos, pero pronto desaparecieron del mapa y quedaron las migajas para los demás. Y lo peor fué que al ciudadano de a pie los financieros le habían hecho llegar a creer que era una persona adinerada (al menos aparentemente), una vivienda amueblada con vistas, un buen coche, unas tarjetas de crédito abierto y una hipoteca brutal sobre todos esos bienes, a la cual se revisaba el tipo de interés en función del Banco Central Europeo que manda sobre los bancos y gobiernos de Europa.

Pues bien el sistema capitalista llegado este momento de quiebra técnica se reinventa; los estados prestan dinero a los bancos para que no cierren, los agrupan para que sean más fuertes, los bancos a su vez cierran el crédito a todo el mundo, incluso entre ellos, no se fían, los tipos de interés ahogan a las empresas y al ciudadano, los impuestos también, el cierre de empresas y la gente que se queda sin trabajo es un hecho imparable, las hipotecas no se pueden devolver, los de a pie ya no son adinerados y pasan a ser deudores, además los bancos se quedan con sus viviendas, sus coches, etc… ( que nunca fueron suyos ). Ruinoso.

A todo esto los políticos se dan cuenta de golpe que han gastado más de lo que podían, entre lo que era oficial y lo que no lo era (que era el pedazo de tarta mas grande), y ahora como lo arreglamos, bueno fácil, emitiremos mas deuda pública, subiremos algo más los impuestos indirectos, recaudaremos algo más en el IRPF, haremos recortes sociales en cosas que no tienen mucha importancia como la sanidad, la educación, la cultura, la asistencia a los mayores, etc… Patético que siempre paguen los mismos.

El espíritu original del 15 M, pone de patas arriba todo este sistema empezando por la Ley Electoral y acabando en nuevos planteamientos sociales, económicos, políticos y medio ambientales que persiguen una sociedad más sostenible que la actual.

Este movimiento ciudadano tiene un riesgo enorme en cuanto a su credibilidad, aunque sus razones sean extremadamente justas, y es que es vulnerable a que alguien lo manipule en su beneficio. Hace poco un partido intolerante y xenófobo incendio al personal del "facebook" en nombre del 15 M que originó una investigación a fondo del mismo, aunque la noticia indirectamente perjudica también al movimiento. Por otra parte el movimiento es un grano que le ha salido en mal sitio al sistema y que partidos como el PP o CIU ya han declarado que no quieren verlos ni por asomo, mientras que a una parte del PSOE no le haría ascos pescar su voto.

El tema es que los dirigentes políticos siguen a la suya, escuchando solo a los que les ríen sus gracias y aplauden sus tonterías, pero no al ciudadano de a pie ni caso en sus necesidades. La política se ha convertido en una selva de despropósitos en la cual entre ellos se satisfacen jugando con la ciudadanía, obligándola a estar a su servicio, cuando debería ser al contrario.

Dicen que cuando gobierne el PP crearán 3.500.000 puestos de trabajo, dicen, y porque no lo hacen ahora en la oposición !. Entonces el PSOE podría demostrar que también saben hacerlo, y sería un placer para el ciudadano ver como se peleaban los dos partidos para crear empleo y tener más adeptos que les votarían con seguridad. Eso sería una autentica reforma laboral.

Seamos serios, los políticos nunca han creado ni un solo puesto de trabajo que no sea el de un amiguito y siempre como funcionario, lo demás es cosa del tejido social y los ciudadanos. Pero este tejido precisa de políticas favorables no solo para el empresario, si no para todos. Y eso si se aplicase bien, conllevaría eliminar de tajo muchas administraciones públicas que no se sabe para que coño existen, unos sindicatos que están pagados y bien pagados por el estado y que no se sabe nunca de parte de quien están, bueno si de quien les paga, y a muchísimos cargos políticos que también pagamos para que duerman la siesta bien descansados en sus poltronas, esperando que les devuelvan los favores corruptos de forma inteligente en vez de trajes.

Los jóvenes que están estudiando en las universidades, se sienten inseguros de haber escogido su carrera, los  que estudian formación profesional, no tienen ni donde practicar, los que han optado por el trabajo y con suerte serán explotados vilmente por la reforma laboral o tendrán que seguir donde está una gran mayoría, en el paro. Ese es el futuro más inmediato, guste o no guste, pero hay que despertar ya de esta pesadilla. 

No se trata de indignarse solamente, si no que hay que dar pasos para que se recobre la ilusión de un estado del bienestar, pero sostenible. Y ese es un punto de partida para los movimientos de indignados. Aparte de ir cambiando el sistema, hay que darle forma, con nuevos trabajos nacidos del mismo movimiento, con una nueva mentalidad, y si es necesario crear un partido político para luchar  desde dentro, pues se crea. Nadie del sistema actual nos va a dar NADA, tenemos que crear nosotros mismos el futuro, jóvenes o no.

Jordi M.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Participación en Crítica Lagítima